En uno de sus valles recorrido por el río Iregua, está el Camero Nuevo, tierra de bosques, pastizales, cumbres y pequeños valles, donde se sitúan 13 pueblos con historia, tradiciones y leyendas, que siglos atrás se agruparon bajo la denominación de Hermandad de las 13 Villas.
Sobre el cauce cubierto del río Albercos, obra que realizó la Unión Ortigosana en 1890, se encuentra el centro del pueblo, alrededor de una fuente con su reloj de sol (de 1867). A su lado, un joven olmo, que nos recuerda a otro vetusto que estuvo en ella antaño, es testigo de las danzas que año tras año tienen lugar en honor a su patrona.
Alrededor, observamos el Ayuntamiento y en una esquina encontramos el Casino de Ortigosa, completando uno de esos espacios sociales con múltiples funciones, destacando la de reunir a los vecinos de las dos laderas del río.