En uno de sus valles recorrido por el río Iregua, está el Camero Nuevo, tierra de bosques, pastizales, cumbres y pequeños valles, donde se sitúan 13 pueblos con historia, tradiciones y leyendas, que siglos atrás se agruparon bajo la denominación de Hermandad de las 13 Villas.
Es la única muestra castellar de la comarca. Sobre el pueblo se levanta una peña que se corona con esta construcción defensiva, que es única en los Cameros, aunque en la toponimia existen otros términos de carácter defensivo, como en el caso de la vecina Viguera. Debió contar con otras defensas exteriores que se adaptarían al contorno del castillo.
El enclave tuvo relación con los Señores de Cameros (siglo XII) y posteriormente con los Condes de Nieva, ya en el siglo XV.
Su acceso en la actualidad, es complicado debido al estado del camino de acceso, estrecho y con fuerte pendiente.