En uno de sus valles recorrido por el río Iregua, está el Camero Nuevo, tierra de bosques, pastizales, cumbres y pequeños valles, donde se sitúan 13 pueblos con historia, tradiciones y leyendas, que siglos atrás se agruparon bajo la denominación de Hermandad de las 13 Villas.
Es el primer puente que cruza el río Iregua y era imprescindible en el pasado para caminar hacía pastos y tierras de labor. La tradición, que le atribuye un origen romano, dice que servía para unir Varea con Numancia a través de la Vía Romana.
El puente, construido en el siglo XVI, separa la zona residencial del lugar en el que antaño estaba el espacio industrial donde se instalaron molinos, batanes y fábrica textil. Esta última, de gran tamaño, se mantiene hoy con otra dedicación pero nos demuestra el pasado industrial de este lugar.
Por esta margen del río Iregua se conducía el agua a los dispositivos hidráulicos que movían ruedas y telares.