En uno de sus valles recorrido por el río Iregua, está el Camero Nuevo, tierra de bosques, pastizales, cumbres y pequeños valles, donde se sitúan 13 pueblos con historia, tradiciones y leyendas, que siglos atrás se agruparon bajo la denominación de Hermandad de las 13 Villas.
En el edificio de las antiguas escuelas se han recuperado muchos objetos vinculados con la educación. Se trata de una colección que nos narra la vida escolar de estos pueblos en los que la educación fue parte del motor que impulsó a la emigración. Muchos de sus vecinos marcharon al sur de España y a América a realizar diferentes actividades, sobre todo comerciales, gracias a una cierta formación recibida en estas escuelas y en la educación nocturna, que permitía a los jóvenes pastores y labriegos, formarse después de su trabajo en el campo.
La colección, recogida en 1996 por todos los vecinos muestra distintos objetos relacionados con la instrucción escolar.