En uno de sus valles recorrido por el río Iregua, está el Camero Nuevo, tierra de bosques, pastizales, cumbres y pequeños valles, donde se sitúan 13 pueblos con historia, tradiciones y leyendas, que siglos atrás se agruparon bajo la denominación de Hermandad de las 13 Villas.
Al lado del río, se encuentra este conjunto formado por el puente, la escalera, el paseo, la ermita y el frontón. La ermita es una construcción barroca en sillería y ladrillo con cubierta de pizarra, levantada a mediados del siglo XVIII. Tiene adosada la casa del santero, persona encargada del cuidado del templo, y personaje muy característico de la vida tradicional camerana.
La familia Arenzana, en 1871, financió el paseo y años más tarde, hicieron lo mismo con el frontón, levantado en piedra de sillería. Los árboles que bordeaban el conjunto dieron nombre a la ermita y a la virgen patrona del lugar. Es un espacio muy utilizado en época estival donde se desarrollan los bailes festivos y los partidos de pelota.