En uno de sus valles recorrido por el río Iregua, está el Camero Nuevo, tierra de bosques, pastizales, cumbres y pequeños valles, donde se sitúan 13 pueblos con historia, tradiciones y leyendas, que siglos atrás se agruparon bajo la denominación de Hermandad de las 13 Villas.
El viejo olmo que los habitantes han guardado como un símbolo del lugar, destaca delante de la iglesia. Con más de 4 siglos de vida, ha sido testigo de las principales reuniones vecinales, lugar de cita y buen consejero para todas las generaciones que lo han conocido.
En muchos pueblos cameranos el olmo de la plaza tenía un significado especial, y hasta la llegada de la grafiosis los olmos eran frecuentes en pueblos y ciudades. Sin embargo, esta enfermedad acabó con el 90 % de ellos. En El Rasillo hay un claro empeño de sus habitantes por mantener vivo este ejemplar que es el único olmo de montaña que se conserva en una plaza en toda España.